MoraBanc inaugura la nueva sede central en Andorra con un homenaje a sus raíces familiares

Última Actualización 20:41

La remodelación permite un ahorro energético del 35% y de agua del 50%

ANDORRA LA VELLA (ANDORRA), 21 (EUROPA PRESS)

MoraBanc ha inaugurado este martes oficialmente la nueva sede central de Andorra la Vella en el edificio Mil·leni, durante un acto que ha puesto en valor las raíces familiares del la entidad.

Los discursos han destacado el papel de la banca como palanca de crecimiento económico y social, y el compromiso de MoraBanc con el país en más de 70 años de historia, informa en un comunicado.

Cuatro representantes de la familia fundadora han descubierto un bonsai gigante que quedará en el edificio como "símbolo de las raíces".

El presidente de la entidad, Joan Maria Nin, ha dicho que entienden la banca como un actor que "construye y transforma la sociedad", y que la renovación de la sede social prueba como se quieren mejorar las condiciones de trabajo de los empleados y también el medio ambiente.

El consejero delegado, Lluís Alsina, ha dicho que la reforma culmina la transformación en un banco que apuesta por la digitalización "sin perder el factor humano y la atención personal al cliente".

También ha destacado el compromiso con Andorra a la vez que se tiene una mirada internacional, y ha constatado la redefinición de la entidad en los últimos años con un crecimiento constante a todos los niveles, que se consolida con unas instalaciones "a la altura del proyecto".

EDIFICIO REFERENTE

En el icónico edificio de MoraBanc, en la céntrica avenida Meritxell, trabajan 280 personas y acoge la oficina comercial más grande de la entidad, equipos de banca privada y de empresas, y buena parte de los servicios centrales de la entidad.

La reforma ha seguido criterios de sostenibilidad que convierten el edificio en un "referente al país": gracias al uso de materiales y sistemas eficientes se ha conseguido un ahorro energético global del 35%, con un 16% de autogeneración de energía renovable mediante placas fotovoltaicas.

Las emisiones de CO2 se han reducido con la instalación de equipos de aire primario, iluminación led de bajo consumo, aislamiento de última generación y un sistema de gestión energética centralizada, además de conseguir un ahorro del 50% en el consumo de agua.

La ejecución de las obras se ha hecho en dos fases a lo largo de dos años y ha sido responsabilidad de GCA Architects, la firma de Ton Puig que ya había liderado la reforma integral del inmueble del año 2000, con la participación del estudio andorrano Cinc Estudio Arquitectura.