Exige "una negociación global sobre las condiciones laborales"
BILBAO, 25 (EUROPA PRESS)
El coordinador general de LAB, Igor Arroyo, ha advertido a la patronal vasca Confebask de un "otoño caliente" si no se garantiza un salario mínimo propio en Euskadi de 1.500 euros mensuales y ha asegurado que el lehendakari, Imanol Pradales, si quiere que la patronal "se siente a la mesa de negociación, tiene resortes para presionar".
En una entrevista a Radio Euskadi recogida por Europa Press, Arroyo ha recordado las iniciativas puestas en marcha por LAB y ELA para conseguir un salario mínimo "propio y digno" que se acerque al 60% del salario medio, que serían 1.600 euros, como son la presentación de una Iniciativa Legislativa Popular en el Parlamento vasco y convocar para negociarlo a la patronal que "nos dio un portazo en la cara".
Asimismo, ha señalado que ELA y LAB han planteando "una propuesta muy posibilista" a la patronal, que pasa por un salario mínimo de 1.500 euros", pero Confebask "tampoco se sentó", por lo que, "puede hablar mucho Pradales sobre la negociación colectiva, pero esa vía está bloqueada porque la patronal la ha bloqueado".
Tenemos una segunda vía que consiste en el cambio de la normativa, en el cambio del Estatuto de los Trabajadores a nivel estatal, para que el Gobierno Vasco pueda regular, sin necesidad del concurso de la patronal, esta materia.
En relación a las 140.000 firmas recogidas para impulsar la ILP para modificar la legislación estatal de forma que el Gobierno vasco pueda regular "de manera directa, desde sus competencias, esta materia estratégica", Arroyo ha considerado que el lehendakari, Imanol Pradales, "prefiere que se ponga en marcha esa mesa de negociación entre sindicatos y patronal porque no tiene muchas ganas de ir a Madrid a defender esta cuestión, porque en su agenda de cara a Madrid prioriza otro tipo de cuestiones".
En ese sentido, ha advertido de que "la faena que tiene Pradales es que la patronal no le ha dado ni la más mínima posibilidad hasta ahora y se ha negado a sentarse en la mesa", pero si el lehendakari "quiere que la patronal se siente a la mesa, tiene resortes para presionar".
"Por una o por otra vía estamos determinados a consumar este objetivo, a conseguir un salario mínimo propio, y es algo que será una prioridad para los próximos meses", ha asegurado, para criticar que "muchas veces, a nivel público, la patronal vasca ha hecho bandera del diálogo social y parecía que éramos unos determinados sindicatos los que no teníamos voluntad de acordar, pero lo que hasta ahora se ha venido conociendo como diálogo social era una escenificación sin contenidos".
La patronal, ha criticado, "no tenía y no tiene la voluntad hasta el día de hoy de abordar medidas de cambio estructurales que beneficien al conjunto de los trabajadores". "Cuando LAB y ELA han planteado una medida muy concreta y una propuesta muy posibilista de 1.500 euros de salario mínimo, ahí se han visto las costuras de la patronal, y ahí se ha visto que todo eso del diálogo social es una pantomina", ha denunciado.
Arroyo ha advertido a la patronal vasca de que "si no se sienta en esa mesa para negociar un salario mínimo a nivel interprofesional", el sindicato va a "generar conflictos mesa por mesa en aquellos sectores que están por debajo de ese salario mínimo de 1.500 euros". "Si no quiere un conflicto general, va a tener numerosos conflictos a nivel sectorial, porque estamos hablando de una cuestión de justicia", ha amenazado.