Avisa de falta de financiación para el nuevo modelo de cuidados: "Tiene que ir acompañado de recursos. Lo otro, son brindis al sol"
MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
El presidente de la Federación Empresarial de la Dependencia (FED), Ignacio Fernández-Cid, ha advertido de que, en el sector de la dependencia en España faltan "unos 130.000 profesionales" --en residencias, centros de día, ayuda domiciliaria y teleasistencia del sector privado y concertado--, y ha pedido al IMSERSO y al Ministerio de Derechos Sociales que creen una mesa de planificación junto a patronales, sindicatos y comunidades autónomas.
"Por lo menos en el sector faltarán unos 130.000 profesionales, es que somos muy intensivos en personal, porque claro, al final es personas que cuidan de personas", ha explicado Fernández-Cid, en una entrevista concedida a Europa Press.
Ante esta situación, el presidente de la FED considera necesario sentarse a planificar el futuro. Por ello, ha reclamado al Ministerio de Derechos Sociales y al IMSERSO crear "una mesa de planificación" para abordar "juntos" los retos del sector.
"Usted tiene el mapa de demanda y nosotros tenemos la capacidad de hacer las inversiones y de desarrollar la gestión de la oferta, pues ¿por qué no nos sentamos y planificamos lo que nos espera para el futuro?", ha planteado Fernández-Cid.
Además, ha precisado que este "gran problema" de "la falta de profesionales" es "cada vez más acuciante" porque "no se toman medidas" y "el país sigue envejeciendo".
En concreto, ha puntualizado que se necesitan gerocultores, médicos, terapeutas pero, "sobre todo enfermeros" en las residencias y centros de día, y que no hay ni siquiera "para cubrir el relevo generacional".
Por ello, entre otras medidas, Fernández-Cid plantea crear un nuevo perfil, el de "ayudante de enfermería" para descargar a los enfermeros y enfermeras, por ejemplo, de todo el trabajo administrativo.
"No se trata de hacer intrusismo, ni de sustituir a los enfermeros, no, es que en el trabajo de un enfermero hay mucho trabajo administrativo. Bueno, pues ¿por qué no creamos un nuevo perfil que potencie, que ayude, que complemente al enfermero titular?", ha sugerido.
Otra medida que plantea es "agilizar los trámites administrativos para homologar" los títulos de personas extranjeras. De esta forma, a su juicio, se podría acabar también con la "economía sumergida" que hay en el ámbito de los cuidados. En este sentido, ha recordado que cuando llegó la pandemia, "salió un decreto que permitió contratar a esas personas sin homologación" y ha denunciado que "a los tres meses" les "obligaron a echarlos a la calle".
Una tercera propuesta es "contratar en origen". "Se les reconoce ya la formación en origen, si tienen que hacer alguna formación complementaria, que la hagan allí mismo y después ya vienen con un contrato debajo del brazo. Y viene todo regularizado", ha comentado.
En cuanto al atractivo de las profesiones de cuidado, Fernández-Cid ha opinado que "el cuidado de las personas mayores no gusta al español", aunque también ha reconocido que también puede influir la remuneración o el reconocimiento de estas profesiones.
"El convenio colectivo de lo social, aproximadamente, es un 30% más bajo que el de sanidad. Muy bien, pues una medida podría ser, ¿y por qué no nos pagan con arreglo a un sanitario? Y nosotros subimos el convenio colectivo, pero ustedes con los precios públicos lo reconocen y lo pagan", ha idicado.
Si bien, ha precisado que "hay un problema en esa ecuación" y es "que al menos de las casi 400.000 plazas residenciales que hay en el país, quitando 100.000 que son públicas, de las otras 300.000, 183.000 son privadas" y de ellas, "el 30% tienen prestación económica vinculada al servicio, el cheque de residencia".
"Si nosotros vamos con esos salarios, nuestros precios tienen que subir. ¿Y va a poder pagar la familia los nuevos precios? Porque claro, nos tendremos que ir a cerca de 4.000 euros", ha advertido, al tiempo que ha abogado por encontrar un "equilibrio".
FALTA DE FINANCIACIÓN
Por otro lado, el presidente de la FED ha señalado que, tras la falta de profesionales, "el segundo problema" del sector es "la falta de financiación" porque, según ha indicado, España invierte "un 0,8% sobre el PIB en dependencia, frente a otros países que lo están haciendo entre el 2 y el 2,5".
"Si resulta que tenemos idea de copiar modelos que funcionan muy bien en el centro y norte de Europa, y los queremos importar aquí, pues está muy bien, pero todo tiene que ir acompañado de un precio, de unos recursos necesarios para poderlo desarrollar bien", ha añadido.
Por ello, con respecto al nuevo modelo de cuidados que propone el Gobierno, ha asegurado que desde la FED están "totalmente de acuerdo" con "incentivar que la gente envejezca en casa" pero "dependiendo del grado de dependencia que cada uno tenga" y siempre que se cuente con recursos, más personal para esa atención individualizada y "una infraestructura necesaria para poder atender los deseos de esas personas".
"Tiene que ir acompañado de recursos. Y lo otro, son brindis al sol que, además, crean falsas expectativas, que son muy peligrosas. Porque uno espera entonces, ¡hombre, qué bien, me voy a poder quedar aquí con un asistente! Pues es que la respuesta que hoy por hoy se le está dando a ese gran dependiente, para que se quede en su domicilio, son en el grado máximo 94 horas de atención al mes. Y eso son 3 horas y 8 minutos. Pero la realidad es que la media de asistencia a un gran dependiente en domicilio es de 57,33 horas al mes, que eso no llega ni a 2 horas", ha expuesto Fernández-Cid.
Sobre el borrador del anteproyecto de ley que reformará las leyes de dependencia y discapacidad, al que tuvo acceso Europa Press, Fernández-Cid ha valorado positivamente que los trabajadores de residencias de mayores en situación de dependencia o de personas con discapacidad vayan a estar obligados a acreditar que no tienen antecedentes por delitos sexuales, algo que considera que era "necesario" y "evidente".
Por otro lado, sobre el hecho de que las inspecciones deban ser publicadas, el presidente de la FED ha advertido de que hay "17 modelos distintos" y que, por tanto, "primero" habría que "unificar el criterio" para que todos tengan "los mismos parámetros y las mismas formas de actuar"; y sobre la figura del asistente personal, que también contempla el borrador del anteproyecto, el presidente de la FED ha propuesto que esa persona esté contratada por una empresa para que haya "un control".